Entre un calor apabullante y los gritos atronadores de los fanáticos culés, el Barça se puso a tono hoy en el Red Bulls Arena de Harrison (Nueva Jersey), donde hizo su último entrenamiento de cara a la pretemporada que estrena el sábado contra la Juventus.
Banderas, camisetas de las estrellas del equipo, y, sobre todo, muchos brazos en el aire, incluidos los de unos cuantos niños a hombros de sus padres, recibieron desde las gradas a los 26 jugadores que aterrizaron en Estados Unidos el miércoles.
Messi y Neymar Jr despertaron la máxima expectación en su tardía salida al campo, especialmente el brasileño, que arrancó silbidos y algún “no te vayas”, a raíz de los rumores que lo sitúan volando fuera del FC Barcelona, al PSG.
No obstante, y en la misma línea en la que se pronunció hoy el club azulgrana, el nuevo entrenador del equipo, Ernesto Valverde, expresó en una rueda de prensa previa a la práctica su “convencimiento” de que el delantero “se va a quedar”.
“Neymar está con nosotros, contamos absolutamente con él y hemos hablado cuestiones tácticas”, señaló el técnico, que se incorporó al Barça hace apenas dos semanas y descartó ir más allá ante la insistencia de los periodistas.
Tampoco lo hizo Sergi Busquets, que esquivó las preguntas sobre su compañero apuntando que es Neymar Jr quien debe ofrecer información, si la tiene, y que por encima de todo cree que “mejor que aquí, no estará en ningún lado”.
“Yo lo que quiero es que esté aquí muchos años”, zanjó el capitán del conjunto, mientras que Valverde rechazó ponerse en una “situación” que “no ha sucedido” porque es “preocuparse dos veces”.
Durante la práctica, pausada brevemente para que le vendaran un tobillo a Leo Messi, Neymar Jr mostró complicidad con otros jugadores, como el astro argentino o el uruguayo Luis Suárez, un “tridente” al que la afición cazó hablando en más de una ocasión.
El entrenamiento, de poco más de una hora, dejó entrever la incipiente relación entre el nuevo técnico y los jugadores que han viajado a Estados Unidos en esta expedición para jugar en la International Champions Cup.
La disputa del Barça contra la Juventus, que se celebra mañana en el estadio MetLife de East Rutherford (Nueva Jersey), será el primer partido de la pretemporada estadounidense y el primero de Valverde como técnico.
El entrenador aseguró estar viviendo con “normalidad y expectación” el momento, aunque reconoció lo “diferente” del torneo, que no es oficial. “Tengo ganas de ver a mi equipo en competición, voy conociendo a los jugadores poco a poco”, agregó.
Sobre sus planes de cara al encuentro, Valverde no se explayó, aunque sí dijo que los jugadores “todavía no están suficientemente rodados” y que repartirá el tiempo entre ellos con “cambios en el descanso para que haya participación”.
El baño de multitudes de la sesión de hoy en Nueva Jersey, en la que se colaron hasta siete jóvenes espontáneos, mostró el músculo que puede sacar el Barça en un torneo que también le enfrentará al Manchester United y al Real Madrid.
En este sentido, precisamente, Busquets negaba antes del entrenamiento que el equipo en el que ha militado nueve temporadas esté “cansado” o acercándose al “fin de un ciclo”.
“Cuando no ganas todos los títulos importantes, siempre se dice que se acaba una generación y lo que ha demostrado este equipo es que siempre ha ganado, unos años más y otros menos”, admitió.
“El año pasado no fue el mejor para nosotros, pero tenemos las esperanzas puestas en este con un nuevo técnico y ojalá nos vaya bien, con muchos títulos y victorias”, concluyó.