Fue un duro reproche, incluso para Donald Trump, el que dirigió el casi seguro candidato presidencial republicano a la única gobernadora latina de Estados Unidos en el estado que gobierna, New Mexico.
Durante un bullicioso mitin esta semana en el estado con más hispanos del país, Trump criticó a la gobernadora republicana Susana Martinez, diciendo que ella no estaba haciendo su trabajo en materia de desempleo y de ayudas federales para alimentos, ni siquiera al tratar de contener la crisis de refugiados sirios. Martinez, que no ha respaldado al presunto candidato presidencial del Partido Republicano, evitó asistir al evento en Albuquerque, alegando que tenía una agenda ocupada.
La disputa pública ha mitigado cualquier conjetura que barajara a Martinez como posible candidata a vicepresidenta para atraer más votantes mujeres y de minorías al bando republicano. También sumó a la gobernadora en su segundo mandato a otros republicanos destacados que han recibido ataques mientras Trump trata de consolidar sus apoyos de cara a la ronda final de elecciones primarias que incluye New Mexico y California.
Políticos clave salieron en defensa de Martinez, incluso el presidente de la Cámara de Representantes Paul Ryan, el gobernador de Wisconsin Scott Walker, el ex gobernador de Florida Jeb Bush y el senador de Florida Marco Rubio, a quien Martinez respaldó para la nominación presidencial en marzo cuando su campaña decaía.
“Susana Martinez es una gran gobernadora, cambió los déficits por superávits, redujo impuestos”, declaró Ryan esta semana a los periodistas.
Bush tuiteó que Martinez es “el futuro de nuestro partido” y Walker dijo que la mujer impulsó reformas conservadoras en un estado que el presidente Barack Obama ganó dos veces.
Durante el mitin del martes en Albuquerque, donde los manifestantes lanzaron playeras en llamas y derribaron barricadas, Trump describió a New Mexico como un estado acosado por el desempleo y con creciente dependencia en la ayuda alimenticia federal, echando la culpa directamente a Martinez.
“Su gobernadora tiene que hacer un mejor trabajo”, dijo Trump. “No está haciendo el trabajo. Hey, quizá me presente a gobernador de New Mexico”.
Al preguntarle sobre Martinez en una conferencia de prensa el jueves, Trump reconoció que ha favorecido a otro precandidato republicano, pero añadió: “Imagino que vendrá a mi lado”.
Un portavoz de Martinez dijo que la gobernadora “no será intimidada para que apoye” a Trump y describió las acusaciones como golpes bajos políticos. La oficina de la gobernadora respondió que el empresario multimillonario utilizó información económica que data del 2000 para exagerar las tendencias y pasó por alto los esfuerzos de Martinez para atar los beneficios alimenticios a los requerimientos laborales.