Durante 54 minutos de escasas emociones y mucha lluvia, pareció que la sólida defensa de los Rams permitiría que Jared Goff se llevara el triunfo en su debut dentro de la NFL.
Pero con dos dramáticas series ofensivas, Ryan Tannehill y Miami transformaron la situación.
DeVante Parker atrapó un pase de nueve yardas de Tannehill, a 36 segundos del final, y los Dolphins remontaron para superar el domingo 14-10 a Los Ángeles.
Tannehill lanzó para 172 yardas y los Dolphins (6-4) hilvanaron su quinto triunfo consecutivo. Miami fue anulado por la defensa de los Rams hasta las últimas dos series de la lluviosa jornada en el Coliseum, donde el público se quedó atónito.
Con las uñas, los Dolphins mantuvieron viva su mejor racha de victorias desde 2008. ¿Cómo fue posible?
“Ni siquiera lo sé”, respondió el entrenador de Miami, Adam Gase. “Simplemente nada nos salía bien. Estuvimos terribles en el ataque”.
Poco después de que Jarvis Landry capturó un pase de 10 yardas en la zona prometida, con 4:02 minutos por disputarse, los Dolphins tuvieron nuevamente el ovoide y avanzaron hasta concretar la jugada en que Parker se zambulló para hacer la recepción en una esquina de la zona de anotación.
Miami ganó 152 de sus 240 yardas totales en las últimas dos series. Los jugadores de la defensa de Los Ángeles, que ha sido una fortaleza en la campaña, terminaron decepcionados y furiosos.
“Jugamos mucho mejor todo el día”, afirmó el defensive end Robert Quinn. “Seguimos luchado, pero creo que esos últimos seis minutos estarán en nuestras pesadillas”.
Goff completó 17 de 31 envíos para 134 yardas, en un debut más bien discreto por parte de la primera selección de la NFL, en el décimo partido de los Rams en la campaña.
“Me sentí bien”, expresó. “Evidentemente estamos decepcionados por el resultado y por cómo salieron las cosas al final de un partido en que nos sentíamos bien y teníamos el control. Con seis minutos restantes, no pudimos resolverlo”.
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Por GREG BEACHAM
