Por: Amín Cruz |
“Es necesario revisar las reglas del juego entre países ricos y pobres”. DM
El Presidente Lic. Danilo Medina Sánchez en las Naciones Unidas, en presencia de todas y todos los presidentes y ministros de gobiernos del mundo se expresó de manera sencilla, humilde, clara, objetiva y sincera, clamando por una verdad que la conoce el mundo, pero han actuado en su gran mayoría como los “sordos y ciegos”, claro, sin ofender ni discriminar a estos seres humanos que por su naturaleza tienen una deficiencia humana.
En esta ocasión el presidente Medina en su discurso clamo en la ONU, tal como lo hizo el gran defensor de los Indios, Fray Antón de Montesino hace más de 500 años, cuando subió al púlpito en el año 1511. El presidente Danilo Medina, llamó a enfrentar la desigualdad y la pobreza e hizo un llamado a la unidad de todos los países del mundo, enfatizando en el papel que tienen y deben jugar las grandes potencias de la humanidad para cerrar la brecha de la desigualdad social.
En esta pieza histórica el presidente Danilo Medina hizo un análisis nacional de nuestra economía y nuestra humanidad. Profetizando las realidades que vive día a día el Caribe, América Latina y el mundo. Si las grandes potencias acompañan a los pequeños países se puede dar un salto cualitativo y cuantitativo a favor de las grandes mayorías, rompiendo el abismo que existe en el mundo donde un 1 % de la humanidad controla tanta riqueza, como el 99% la pobreza.
Sencillamente no tiene razón de ser el esquema económico que privilegia a los más poderosos, permitiendo a su vez, que persistan niveles de desigualdad tan altos que 62 personas poseen más riquezas que la mitad de la población mundial. Sin embargo, para que estas metas se realicen y logremos sacar de la pobreza a cientos de millones de personas, es necesario algo más que adoptar una serie de recetas e indicadores.
En su discurso el Presidente Medina manifestó “nuestro país apuesta por la reducción sustancial de las desigualdades, pero no solo entre los habitantes más ricos y más pobres de nuestros países, sino también en la configuración de las relaciones internacionales entre países pobres y países ricos. Sentémonos a dialogar con el respeto mutuo y la igualdad, sin privilegios y por el bien común. Y hagámoslo convencidos de que esta es la única forma en que la humanidad en su conjunto ganará”.
El discurso del presidente DM, hace una advertencia en el momento más oportuno para enfrentar la insensibilidad e insensatez de hombres y países con ambiciones desmedidas, el mundo en que vivimos está plagado de miserias que cercenan las posibilidades de desarrollo de gran parte de la humanidad. El mejor llamado esta hecho en el marco de la 71va. Asamblea General de las Naciones Unidas, la agenda de desarrollo post-2015, con su adopción de Metas de Desarrollo Sostenible, es una buena hoja de ruta para muchos de los desafíos que enfrentamos en América Latina, El Caribe y el Mundo.
Es una posición valiente, seria y correcta del Presidente Danilo Medina cuando criticó en su discurso ante la 71va. Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas lo que llamó hipocresía de los países más industrializados para con la aplicación de los Tratados de Libre Comercio y la libre circulación de mercancías.
Nuestro país es víctima como otros tanto de esta situación ya que se prestó a firmar un Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Centroamérica donde no se ha visto ninguna ganancia de causa del mismo, en este caso los negociadores se engañaron o se dejaron engañar de los representantes estadounidenses sobre el TLC-CAFTA-RD ya que firmaron todo ante la supuesta premura de sacar ventajas de ese acuerdo.
Lo dijo el Presidente, es urgente realizar cambios profundos en las formas en que se dan los intercambios comerciales y los flujos financieros. Es decir, es necesario revisar las reglas del juego entre países ricos y pobres. Es tiempo que de las Naciones Unidas, con su nuevo Secretario General pongan en práctica la agenda de desarrollo post-2015, con su adopción de Metas de Desarrollo Sostenible, tal como lo clamó el Presidente Danilo Medina.