Por Georgina Prodhan y Kathrin Jones |
FRÁNCFORT, Alemania (Reuters) – Deutsche Bank intentará antes de la elección presidencial del próximo mes en Estados Unidos llegar a un acuerdo con las autoridades de ese país, que exigen una multa de hasta 14.000 millones de dólares por irregularidades en ventas de activos respaldados por hipotecas.
La amenaza de una multa tan grande ha hecho que los títulos de Deutsche Bank caigan a mínimos históricos y se necesita urgentemente un acuerdo que rebaje el precio para revertir la tendencia y ayudar a recuperar la confianza en el mayor prestamista de Alemania.
Un artículo de medios del viernes por la noche, que no ha sido confirmado, indicó que Deutsche y el Departamento de Justicia de Estados Unidos están cerca de llegar a un acuerdo por 5.400 millones de dólares, lo que impulsó a las acciones, que cerraron con un alza cercana al 6 por ciento.
“Claramente, siempre que una multa de esta magnitud (14.000 millones de dólares) sea incluso una posibilidad remota, los mercados se preocupan”, escribió el economista jefe de UniCredit, Erik F. Nielsen, en un comunicado el domingo.
Deutsche Bank es mucho más pequeño que rivales de Wall Street como JPMorgan y Citigroup.
No obstante, tiene relaciones comerciales significativas con todas las entidades financieras más grandes del mundo y el Fondo Monetario Internacional (FMI) lo identificó este año como un riesgo potencial más grande al sistema financiero que cualquier otro banco global.
El presidente ejecutivo de Deutsche, John Cryan, estará en Washington esta semana para la reunión anual del FMI y el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung indicó que otros ejecutivos se le unirán para tratar de negociar un acuerdo con las autoridades estadounidenses.
Al igual que los grandes bancos europeos Credit Suisse y Barclays, que también están bajo investigación por irregularidades en la venta de activos respaldados por hipotecas, Deutsche Bank buscará un acuerdo con el Gobierno estadounidense actual.
Un nuevo Gobierno tras la elección presidencial del 8 de noviembre traerá riesgos desconocidos y probables retrasos.