El reconocido jurista y comunicador Rafael Linares denunció el acoso a que ha sido sometido tras haber denunciado el pasado martes que el dirigente del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Guido Gómez Mazara se encontraba en un restaurant del Distrito Nacional junto a Bladimir García un narcotraficante que fue apresado por agentes de la DEA y DNCD, del cual dijo fue solicitado en extradición por Estados Unidos.
Sostuvo que en los últimos días ha sido perseguido por agentes del Departamento Nacional de Investigaciones (DNI) y seguidores del dirigente político a quienes responsabilizó de lo que pueda ocurrirle.
Expuso que después de haber denunciado en su programa de youtube, el apresamiento del narcotraficante, quien según explicó se encontraba junto al dirigente político en un restaurant de la capital por parte de agentes de la DEA y la DNCD, ha sido perseguido por varios vehículos, quienes le graban sus movimientos.
“Quiero hacer de conocimiento público que en los últimos días he sido perseguido por varios vehículos, desde donde me graban todos mis movimientos, por lo que responsabilizo de lo que me pueda pasar al director del DNI y al dirigente político Guido Gómez Mazara” denunció Linares.
Dijo que, hacía extensiva esta denuncia al presidente de la República, Luis Abinader, al ministro de la Fuerzas Armadas, al director de la Policía Nacional, asimismo, a las embajadas acreditadas en la República Dominicana,
El profesional de la toga y el birrete denunció en su programa de youtube sobre el apresamiento del presunto narcotraficante Bladimir García Jiménez, quien fue arrestado en un restaurant del Distrito Nacional, el cual se encuentra detenido en la sede de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).
Su apresamiento se produce luego de que la Segunda Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia, ordenara su arresto para conocer la solicitud de medida de coerción en su contra y la solicitud de extradición.
Se espera que la próxima semana los jueces del alto tribunal judicial del país conozcan la solicitud de prisión preventiva presentada en su contra por el Ministerio Público.
La solicitud de extradición fue presentada por la embajada de Estados Unidos en el país ante el Departamento de Cooperación Internacional y Extradiciones de la Procuraduría General de la República, que dirige Gisella Cueto.
García Jiménez junto al empresario de la construcción Eduardo Rodríguez Cordero aceptaron responsabilidad en el caso de Quirino Ernesto Paulino Castillo y se declararon culpables por narcotráfico, conspiración y lavado de dinero, a través de un acuerdo con la fiscalía federal del Distrito Sur con sede en esta ciudad en 2009. Esto a cambio de sendas sentencias leves de la jueza Kimba M. Wood.
Rodríguez Cordero fue acusado de formar parte de una supuesta banda liderada por Quirino, que habría transportado miles de kilos de cocaína desde el país caribeño hacia los Estados Unidos, fue uno de los primeros arrestados en los días subsiguientes de la extradición del ex capitán a Nueva York.