El púgil mexicano Saúl “Canelo” Álvarez, que esta noche hizo combate nulo con el campeón invicto kazako Gennady Golovkin, en pelea pactada a 12 asaltos, dijo sentirse “frustrado” por el veredicto.
“No estoy de acuerdo para nada con el veredicto”, declaró Álvarez al concluir la pelea. “Fue superior, pienso que la gane porque me mostré superior en el cuadrilátero”.
Álvarez, de 27 años, que cosechó su segundo combate nulo como profesional (49-1-2, 34 nocáuts), mostró el mismo sentir que la jueza Adelaide Byrd, la peor que hay en el mundo del boxeo y de las artes marciales mixtas, que lo vio ganador en 10 de los 12 asaltos para darle una puntuación de 118-110.
Aunque fue un poco más comedido al decir que pensaba había ganado entre siete y ocho asaltos.
“Siempre contrarresté los golpes que colocaba Golovkin y por dos veces lo vi tocado”, comentó Álvarez, aspecto que él solo observó sobre el cuadrilátero. “Hice una gran pelea que mereció el triunfo”.
Sin embargo, la puntuación de los jueces, pero en especial la de Byrd confirmaron los temores de los críticos del siempre “oscuro” mundo del deporte del boxeo que habían anticipado dos cosas sobre la pelea.
Primero, que ambas partes ya tenían pactada de antemano una segunda pelea, y lo único que faltaba por conocer era el camino que habían elegido para llevar adelante sus planes.
Los que conocen el mundo de Las Vegas, donde se permite la vergüenza del llamado “combate” de boxeo entre Floyd Mayweather junior y Conor McGregor, adelantaban que lo ideal para que la imagen del deporte se recuperase sería que Golovkin consiguiese un nocáut.
Pero también adelantaban que la revancha podría llegar por el camino de una decisión polémica de los jueces después de 12 asaltos y eso ha sido lo que lamentablemente ha sucedido.
De hecho, Álvarez habló también de la posibilidad de la revancha y aunque intentó ser diplomático, como que era ajeno a tal realidad, su lenguaje corporal y expresivo lo delató.
“Creo que serán los aficionados los que deben decidir sobre el asunto de la revancha”, comentó Álvarez, el mismo que desde hace más de dos años les ha negado a esos aficionados el deseo que se hubiese enfrentado antes a Golovkin.
Sin ningún argumento válido que exponer, dado que las peleas las deciden siempre los promotores y la de la revancha ya está pactada aunque no se sepa la fecha en el 2018, Álvarez pasó de nuevo a expresar su “frustración”.
“Lo único que quiero dejar muy claro es que me siento frustrado por el veredicto de combate nulo que se ha dado esta noche”, agregó Álvarez.
Pero lamentablemente no tan grande como la que se vivieron los 22.358 espectadores que llenaron las gradas del T-Mobile Arena cuando escucharon un veredicto que ya pasado a la historia como otro de los grandes “fiascos” y “escándalos” en el mundo del boxeo.