La banda colombiana Aterciopelados y la artista mexicana Ximena Sariñana, entre otros, fueron los encargados de poner a bailar a los miles de asistentes en la 18 edición del Festival Día de los Muertos, que se celebró hoy en el cementerio Hollywood Forever de Los Ángeles (California).
Esos artistas estuvieron acompañados por otros como Cuco, Very Be Careful, La Chamba y Chulita Vinyl Club, mientras que El Dasa, Kinky y Lupita Infante rindieron homenaje al fallecido Pedro Infante por el centenario de su nacimiento.
Más de 40 artistas o bandas formaron parte de la alineación del certamen, el más grande relacionado con la celebración del Día de los Muertos fuera de México, que festeja la memoria de los difuntos con coloridas ofrendas, decenas de altares, danzas aztecas y la multitudinaria presencia de las catrinas, calaveras vestidas de forma elegante y tradicional.
De hecho, los ganadores en las diferentes categorías de catrinas se llevaron 3.000 dólares ( 2.584 euros) cada uno.
Entre los altares más destacados llamó la atención uno comunitario en forma de globo terráqueo, que recordaba las tragedias ocurridas este año como el huracán en Puerto Rico o la matanza en Las Vegas.
También fueron constantes las referencias a la diversidad étnica de Estados Unidos y a las decisiones de Donald Trump, presidente del país, en materia de inmigración.
El tema central del festival este año giró en torno al “legado de Posada”, en honor de José Guadalupe Posada, el artista mexicano que creó muchas de esas imágenes tan célebres hoy día.
El autor de “La Calavera Garbancera”, posteriormente denominada “La Catrina” por Diego Rivera, fue uno de los artistas visionarios más importantes de México. El cementerio aprovechó la jornada para mostrar varias de sus piezas originales, así como trabajos de artistas a los que influyó e inspiró. efe