El hijo adoptivo de George Washington era un bueno para nada según la mayoría de los relatos, incluidos los del propio Washington, quien escribió sobre la frustración que le causaba el chico al que llamaban “Wash”.
“Desde su infancia, descubrí una disposición casi inquebrantable a la indolencia en todo lo que no apacentara sus diversiones”, escribió Washington, el padre de la patria.
En aquel entonces, George Washington Parke Custis tenía 16 años y asistía a Princeton, una de las tantas escuelas de las que fue echado. Poco después, regresó a casa en Mount Vernon, donde lo acusarían de procrear hijos con esclavas.
Dos siglos más tarde, el Servicio de Parques Nacionales y la organización sin fines de lucro que administra la finca de Washington en Mount Vernon concluyeron que los rumores eran verdad: En exposiciones separadas, ambas partes muestran que el primer árbol genealógico de la familia tuvo una faceta birracial en sus bifurcaciones iniciales.
“Ya no se ignora esta parte de la historia”, señaló Matthew Penrod, policía del Servicio de Parques Nacionales y director de programas en la Casa Arlington, donde convergieron las vidas de los Washington, sus esclavos y el general confederado Robert E. Lee.
El presidente George Washington no tuvo descendientes directos y su esposa, Marth Custis, era viuda cuando se casaron. Washington adoptó a los nietos de Martha —”Wash” y la hermana de éste, “Nellie”— y los crió en su hacienda de Mount Vernon.
Parke Custis se casó en 1804 con Mary Fitzhugh y tuvieron una hija que llego a adulta, Mary Anna Randolph Custis. En 1831, ella se casó con un primo tercero, Lee, quien entonces era teniente del Ejército de Estados Unidos.
Fuera del matrimonio, Parke Custis posiblemente procreó hijos con dos de las esclavas de su padrastro: Arianna Carter y Caroline Branham, de acuerdo con las muestras instaladas en la Casa Arlington y en Mount Vernon.
El primer reconocimiento oficial sucedió en junio, cuando el Servicio de Parques hizo una representación de la boda en 1821 de Maria Carter con Charles Syphax en la Casa Arlington, la mansión ubicada en lo alto de una colina que da hacia la capital y que Custis construyó (y Lee después administró) como un templo dedicado a su padrastro adoptivo.
En un nuevo árbol familiar, develado durante la representación, aparecen los padres de la novia como Parke Custis y Arianna Carter.
“Reconocemos totalmente que la primera familia presidencial de este país fue mucho más de lo que aparece superficialmente”, afirmó Penrod durante la ceremonia.
La hacienda Mount Vernon, de administración privada, explora esta historia relacionada con esclavos en “Lives Bound Together”, una muestra inaugurada este año en la que se admite que Parke Custis posiblemente también procreó a una niña llamada Lucy con la esclava Caroline Branham.
Los guías de turistas no eran tan directos en sus narraciones cuando Penrod comenzó sus labores hace 26 años en la Casa Arlington.
El personal tenía la indicación de describir las moradas de los esclavos como “estancias de los sirvientes” y “centrarse en Lee, para homenajearlo y presentarlo con una imagen muy positiva”, declaró Penrod.