Las autoridades denuncian la toma por hombres armados de cinco hospitales y del canal ecuatoriano TC Televisión
La Policía confirma 70 detenidos y la liberación de tres agentes secuestrados por personas armadas en Machala
Al menos diez personas han muerto, entre ellos dos agentes de Policía Nacional de Ecuador, y tres han resultado heridas, en el marco del “conflicto armado interno” declarado por el Gobierno ecuatoriano, liderado por Daniel Noboa, debido a la espiral de violencia desencadenada por la actividad de grupos “narcoterroristas”.
En un primer momento se ha informado de la muerte de ocho personas y tres heridos, incluido un Policía herido de arma de fuego, en incidentes separados en Guayaquil, según ha explicado el cuerpo policial en una rueda de prensa realizada junto al alcalde de la ciudad, Aquiles Álvarez, en las instalaciones de la empresa pública municipal para la Gestión de Riesgos y Control de Seguridad de Guayaquil, Segura EP.
En un comunicado posterior, la Policía de Ecuador ha informado de la muerte de dos agentes “vilmente asesinados por delincuentes armados” en la localidad de Nobol, en la región de Guayas, a los que ha identificado como Alex Taday y Luis Guanotuña. “Este es el sacrificio que juramos a la patria y no descansaremos hasta dar con los responsables de este hecho criminal”, según ha indicado a través de sus redes sociales.
La Policía Nacional de Ecuador ha señalado en su cuenta en la red social X que las operaciones de las últimas horas se han saldado con 70 detenidos, así como con la incautación de ocho artefactos explosivos, 15 cócteles molotov, nueve armas de fuego y más de 300 cartuchos de munición.
Asimismo, ha destacado que han sido confiscados seis vehículos y seis motocicletas, mientras que 17 personas fugadas de prisión han sido detenidas. Por último, tres agentes secuestrados durante los incidentes han sido liberados por las fuerzas de seguridad.
Los agentes han sido liberados en la ciudad de Machala (sur), en un incidente en el que han detenido a una decena de personas implicadas “en estos actos de terrorismo”, mientras que la mesa de trabajo liderada por el alcalde de Guayaquil ha informado de que también se ha registrado la toma de cinco hospitales y del canal ecuatoriano TC Televisión por un grupo de encapuchados armados, así como daños en infraestructuras y vehículos.
A su vez, la Policía ha aseverado que ha desarticulado una organización “terrorista” en Ambato (centro), en una operación que se ha saldado con 17 arrestados, entre ellos tres prófugos, y varios vehículos y armas incautadas. Asimismo, han arrestado en Los Ríos (centro) a siete “sujetos vinculados al secuestro de servidores policiales y hechos terroristas con explosivos”.
Por su parte, la Fiscalía ecuatoriana ha informado de que procesará a trece personas por el delito de terrorismo debido a que ingresaron armados en las instalaciones de la cadena de televisión y por retener al personal del medio de comunicación, mientras que ha presentado cargos por delito de evasión contra los 17 presos que se fugaron del Centro de Privación de Libertad de Riobamba y que han sido posteriormente detenidos.
El alcalde de Guayaquil ha subrayado que su compromiso “es con la seguridad” de la ciudad: “Vamos a trabajar de manera proactiva y colaborativa con la fuerza pública, a quienes apoyamos irrestrictamente. Seguiremos cooperando con nuestro contingente local de seguridad para fortalecer la respuesta conjunta ante la seria crisis de seguridad”.
También ha hecho un llamamiento a la “unidad nacional” y ha mostrado su confianza en que “las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional “tomarán las medidas necesarias para restablecer el orden y la paz en el país”. El alcalde se ha solidarizado con las familias de las víctimas y ha enviado su disposición al mandatario.
Esto se produce después de que Noboa decretase el lunes el estado de excepción para permitir a los mandos policiales y militares intervenir las cárceles tras asegurar que el país vive “una crisis de seguridad penitenciaria”, después de que las autoridades confirmaran la evasión de ‘Fito’ de la cárcel Regional Guayas, en Guayaquil, una de las implicadas en la reciente ola de violencia e inestabilidad dentro de los presidios ecuatorianos.