Pekín.- El presidente chino, Xi Jinping, inició hoy el viaje que le llevará al que será su primer encuentro con Donald Trump en Florida (Estados Unidos), tras realizar una visita de Estado a Finlandia.
Xi comienza este martes su visita al país europeo y permanecerá hasta el día 6, cuando está previsto que continúe su agenda en Estados Unidos, según la información otorgada por el Ministerio de Asuntos Exteriores, que no precisa los detalles de los desplazamientos del mandatario.
En Finlandia, el líder chino mantendrá reuniones con su homólogo Sauli Niinistö y el primer ministro Juha Sipilä en Helsinki, en una visita de carácter económico y la primera que realiza a una nación de la Unión Europea este año.
El Ministerio de Asuntos Exteriores ha remarcado que el viaje de Xi a Finlandia refleja el “apoyo de China a la UE”, en un delicado momento para la Unión tras el inicio del proceso para la salida del Reino Unido.
Tras su visita al país nórdico, Xi se encaminará hacia Florida junto a su esposa, Peng Liyuan, para ser recibidos en la “Casa Blanca del Sur” de Mar-a-Lago (Florida) por el presidente Donald Trump y la primera dama Melania.
Xi y Peng permanecerán en la mansión de los Trump los días 6 y 7, y allí se celebrará el primer “cara a cara” entre ambos líderes, tras un inicio de relación turbulento, por el acercamiento del presidente estadounidense a Taiwán o sus reiteradas críticas contra las prácticas comerciales y en materia de seguridad de China.
Trump ya ha augurado que será un encuentro “difícil”, mientras los chinos insisten públicamente en enviar un mensaje de calma y subrayan que hay más áreas de cooperación entre China y EEUU que de disputa.
Se espera que la amenaza nuclear de Corea del Norte y la relación comercial entre ambos países sean los principales temas de discusión, además de las disputas en el Mar de China Meridional o en Oriente Medio.
Durante la estancia del presidente y la primera dama de China, los Trump les agasajarán con un banquete de bienvenida, si bien en esta ocasión no habrá espacio para el golf, un deporte al que Trump es aficionado y que sí practicó con el primer dignatario extranjero que recibió en esta residencia tras tomar posesión del cargo, el nipón Shinzo Abe.
