En tiempos en que los sedanes dejan de estar con frecuencia en las listas de compras de autos, los nuevos modelos cada día parecen llamar más la atención sobre ellos, con diseños atrevidos y estilo cortante. No es el caso del 2018 Volkswagen Jetta. El Jetta se mantiene convencional, pacifico en apariencia, quizás esperando una completa renovación para el próximo año. Si bien su diseño básico está empezando a mostrar su edad, el 2018 Jetta tiene una gran cantidad de activos para valorar, como un interior espacioso, un comportamiento silencioso y fuerte elección de motores turboalimentados.
Además, la línea Jetta ahora incluye una garantía de 6 años o 72,000 millas, justamente el doble de la cobertura del año pasado. Ese es un gran incentivo para la venta, especialmente dado que la garantía se puede transferir a los propietarios subsiguientes.
La mayoría de los Jetta que encontrará en los concesionarios usan un motor de 1.4 litros en línea turboalimentado de 4 cilindros, que produce 150 caballos de fuerza y 184 lb pie de torque. Transmisión manual de 5 velocidades es estándar y una automática de 6 velocidades se encuentra en la lista de opciones. Los niveles de equipamiento SE Sport como el que nosotros probamos, y SEL, usan un 1.8 turbo también de 4 cilindros en línea, un motor más grande y sediento que agrega 20 caballos de fuerza, pero solo se puede conseguir con trasmisión automática. Los Jetta GLI tienen su propia configuración de suspensión, una apariencia más deportiva por dentro y por fuera, y un turbo de 2.0 litros y 210 caballos de fuerza. Gracias a los cambios recientes en la alineación de motores, podemos considéralos de verdadera vanguardia.
Aunque el estilo conservador del Jetta no es su mayor atractivo, VW ha logrado que su sedán compacto semeje uno de mayor tamaño, quizás el de un sedán mediano. El espacio para los pasajeros en los asientos posteriores es más que suficientes para estirar las piernas, mientras que los 15.7 pies cúbicos de espacio de carga en el maletero, lo colocan entre los mejores de su clase. El Toyota Camry por ejemplo, tiene 15.4 pies cúbicos disponibles para carga.
Sin embargo, el espacio no lo es todo. Al igual que el estilo exterior es anticuado, no hay mucho que destacar en cuanto al diseño interior. El 2018 Jetta trae un tablero simétrico, sonde no hay nada notable en la ejecución, aparte de muchos espacios en blanco alrededor de la palanca de cambios. Lo que se siente como tapicería de cuero en el SE y los niveles de equipamiento más altos, es en realidad cuero sintético resistente. Hay lugares donde el plástico duro es abundante, y si bien puedo pasar esto por alto, es lago molesto en el área del marco de la puerta.
Los niveles de equipamiento más altos tienen un sistema de infoentretenimiento de 6,3 pulgadas, con Apple CarPlay y Android Auto, que es muy fácil de usar gracias a una interfaz limpia e intuitiva.
Los compradores no llegan al Jetta en busca de un auto deportivo, pero este sedan deja mal parados de la mayoría de sus competidores, que generalmente varían de aceptables a descuidados. Se siente plantado y compuesto en las esquinas, y la dirección es precisa y no excesivamente reforzada. De hecho, si hablamos justamente de diversión a la hora de conducir, el 2018 Jetta desafía al Mazda3, que podría decirse, es el sedán compacto que vencer.
El Jetta obtuvo los puntajes más altos en las pruebas de resistencia a colisiones del Instituto de Seguros de Seguridad en Carreteras y otra buena calificación de para su sistema de advertencia de colisión delantera con frenado automático de emergencia. Este sistema es estándar en el Jetta SEL, pero no se ofrece en el acabado más caro, GLI. Esta peculiaridad también es válida para el sistema adaptativo de control de crucero. Tampoco se ofrece en el S y el SE de menor precio. La advertencia de punto ciego y la alerta de tráfico cruzado posterior son estándar en el SE. Todos los modelos traen de forma estándar una cámara en reversa.
Tecnología de seguridad disponible de forma más generalizada, podría ser una de las perspectivas a mejorar para el próximo año. Volkswagen corre el riesgo de quedar rezagada, en un momento en el que algunos de los rivales ofrecen mayor disponibilidad de estos sistemas. Toyota trae una jugosa suite de prestaciones de forma estándar en todos los Corolla, y lo ampliará a la mayoría de sus vehículos en el 2018. El Civic, Mazda3 y el Kia Forte traen todos estos sistemas en automóviles con precios que no van por encima de los $ 23,000 dólares.
El más económico de los Volkswagen Jetta del 2018 es el Jetta 1.4T S, con transmisor manual y precio de $17,895. Unos mil dólares más constarían la versión automática. Le sigue el SE que comienza en los $20,395. El Jetta 1.4T Wolfsburg Edition -nuevo este ano- comienza en los $19,531. Nosotros manejamos un SE Sport que traía precio básico de $22,315. Los niveles de acabado mas alto son el SEL y el Jetta 2.0T GLI DSG, que tiene precio introductorio de $28,362 dólares.
En cuanto a qué Jetta ofrece más valor, pensamos que el SE es una elección sólida. Sin embargo, si el presupuesto lo permitiese, por $ 3,000 solares más, se puede llegar al SEL automático, un cambio razonable para obtener más potencia, más conveniencias interiores y, lo más importante, un conjunto competitivo de tecnología de seguridad electrónica.
Esperemos que el 2019 le traiga al Jetta una buena renovación. Por el momento, aunque ensenando las huellas del paso del tiempo, estos sedan logra mantenerse en la “pelea”.