Boston (EE.UU.), .- El piloto de los Indios de Cleveland, Terry Francona, quien durante ocho temporadas dirigió a los Medias Rojas de Boston con el expelotero David Ortiz Big Papi, de líder, declaró esta noche que el extoletero dominicano se encuentra bajo la supervisión de un equipo médico excepcional.
Francona señaló que personalmente se interesó por el estado de salud en el que se encuentra Ortiz, que fue ingresado la pasada noche en el Hospital General de Massachusetts.
Ortiz llegó en un avión-ambulancia privado que lo traslado desde Santo Domingo, donde el pasado domingo fue herido de gravedad al recibir un disparo de arma de fuego y la bala le penetró por la espalda, atravesó el abdomen y en su recorrido le afectó varios órganos de su cuerpo como el intestino grueso, el delgado, el colón, el hígado y tuvieron que extirparle la vesícula.
Los Medias Rojas se encargaron de hacer frente al pago de todos los costos del envío del avión-ambulancia al igual que los gastos médicos que sean necesarios para su recuperación.
“Lo que si puedo confirmar es que se encuentra en las mejores manos de profesionales médicos que estoy seguro van a hacer una labor excepcional y su recuperación será completa”, destacó Francona.
El actual piloto de los Indios reiteró que hablar de Ortiz o referirse a Big Papi es hacerlo de una persona “única” en todos los aspectos.
“Ortiz es una persona muy especial, no solo para mí, sino para mucha gente”, subrayó Francona, quien dirigió a Ortiz desde el 2004 a 2011. “Podría iluminar una habitación con su personalidad, pero también trabajó duro en su profesión y fue un líder de equipo, que siempre se hizo respetar”.
Big Papi se somete a una segunda cirugía en Boston y Francona confirmó que había hablado personalmente con uno de los doctores que lo atienden y dijo que estaba en “muy buenas manos”, y que todos eran optimista en cuanto a su recuperación.
La que primero confirmó la segunda operación a la que fue sometido Ortiz fue su esposa Tiffany en un comunicado dado a conocer por los Medias Rojas.
“Está estable, despierto y descansando cómodamente esta mañana en la UCI, donde se espera que permanezca durante los próximos días”, indicó Tiffany en su comunicado.
Mientras, los directivos de los Medias Rojas se han comprometido a hacer todo lo posible para ayudar a Ortiz en su recuperación, y el presidente del equipo, Sam Kennedy, lo describe como uno de los “jugadores más queridos” de su historia.
“Me sería difícil pensar en alguien más querido que David”, destacó Kennedy el lunes cuando se estableció todo el plan para conseguir que Ortiz abandonase Santo Domingo. “Es un día muy difícil para la organización. Todos amamos a David Ortiz. Pero tienes que dejar de lado esas emociones y centrarte en lo que es necesario”.
Ortiz, de 43 años, nativo de Santo Domingo, jugó 14 temporadas con los Medias Rojas e hizo 10 apariciones en Juegos de Estrellas en su carrera de 20 años.
El extoletero bateó 541 cuadrangulares con 1.768 carreras impulsadas en 2.408 partidos disputados en las Grandes Ligas y ayudó a Boston a ganar anillos de Serie Mundial en el 2004, 2007 y 2013.
Ortiz comenzó su carrera jugando seis temporadas para los Mellizos de Minnesota (1997-2002), pero su carrera despegó después de unirse a los Medias Rojas, donde hizo su mejor desarrollo como toletero.
La gran hazaña de Ortiz fue que ayudó a los Medias Rojas a capturar su primer título de Serie Mundial en 86 años en 2004, cuando fue el Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Americana.
Ese título acabó con la llamada “maldición” de Babe Ruth, el legendario expelotero que dejó al equipo para irse con sus eternos rivales de los Yanquis de Nueva York y nunca había vuelto a ganar un título de la Serie Mundial hasta que surgió la figura de Ortiz.
También fue nombrado Jugador Más Valioso de la Serie Mundial en 2013, cuando ayudó a los Medias Rojas a derrotar a los Cardenales de San Luis por 4-2 al mejor de siete.
Los Medias Rojas retiraron el No. 34 de Ortiz en 2017, y Boston renombró un puente y un tramo de carretera fuera de Fenway Park en su honor. Ortiz tiene una casa en Weston, en las afueras de Boston.
El resto de peloteros de las Grandes Ligas y en especial sus compatriotas, como el miembro del Salón de la Fama Pedro Martínez, que también fue lanzador estelar con los Medias Rojas y el segunda base Robinson Canó alabaron la figura de Ortiz y expresaron sus deseos de que tenga un pronta recuperación y que lo sucedido con él no se vuelva a repetir con “nadie”.(EFE)