El presidente, Donald Trump, firmó hoy una ley que renueva por seis años el programa por el cual la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) recoge datos sin necesidad de una orden judicial sobre las comunicaciones digitales de extranjeros fuera del país.
“Acabo de firmar la ley 702 para reautorizar la recolección de inteligencia extranjera”, escribió Trump en su cuenta de Twitter.
La ley renueva la Sección 702 de la Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera (FISA, por sus siglas en inglés), a través de la cual la NSA recolecta información sobre las comunicaciones en Internet de extranjeros fuera de Estados Unidos, incluidas aquellas que éstos mantienen con ciudadanos estadounidenses.
Ese procedimiento estuvo sujeto a escrutinio tras las filtraciones del exespía Edward Snowden en 2013 debido a sus implicaciones sobre la privacidad, que han sido criticadas por organizaciones defensoras de los derechos civiles.
Los servicios de inteligencia de EEUU consideran el programa como una herramienta clave en sus labores, y tanto la Casa Blanca como los líderes republicanos del Congreso han defendido la utilidad de ese mecanismo para ayudar a prevenir ataques terroristas.
“La inteligencia (que se produce con este programa) es vital para mantener segura la Nación. Como demuestran los recientes ataques en Nueva York y en el resto del mundo, afrontamos una amenaza constante de las redes terroristas extranjeras y otros actores extranjeros que nos quieren hacer daño”, dijo hoy Trump en un comunicado.
“Para detectar y prevenir los ataques antes de que ocurran, tenemos que poder interceptar las comunicaciones de objetivos extranjeros sobre los que hay sospechas razonables de que poseen información de inteligencia extranjera”, añadió Trump, y subrayó que el programa “ha salvado vidas estadounidenses”.
Pese al interés de la Casa Blanca en aprobar la ley, Trump criticó la semana pasada en Twitter la medida, al asegurar que pudo haber sido utilizada por el Gobierno de Barack Obama para espiar con malas intenciones su campaña presidencial en 2016, una acusación sobre la que no ha aportado pruebas.
Hoy, Trump quiso dejar claro a sus seguidores que la que ha firmado “no es la misma ley FISA de la que abusaron tanto durante las elecciones”.
“¡Siempre haré lo correcto para nuestro país y priorizaré la seguridad del pueblo estadounidense!”, tuiteó el presidente.
