Las autoridades dominicanas en Nueva York advirtieron hoy que se mantendrán vigilantes para asegurar que la estatua en esta ciudad de Juan Pablo Duarte, uno de los padres de la patria, no sea retirada.
Los miembros de una comisión creada por la Cancillería dominicana para defender la estatua señalaron hoy que mantendrán “vigilancia permanente” sobre el futuro de la figura de Duarte.
La comisión, creada por el canciller Miguel Vargas Maldonado, está integrada por el embajador permanente de este país en la ONU, Francisco Cortorreal; el vicecanciller, Carlos García, y el cónsul Carlos Castillo.
“El Gobierno de la República Dominicana estará en vigilancia permanente para prevenir que no sea mancillado el nombre de nuestro patricio, Juan Pablo Duarte”, dijo Castillo en una conferencia de prensa en el Consulado, a la que asistió también el concejal Ydanis Rodríguez, de origen dominicano.
Destacó que Duarte “ha sido uno de los grandes líderes de América” y que su contribución va más allá de lo que hizo por su país.
El grupo comunicó a la Alcaldía la creación de la comisión luego de que un medio local señalara que la figura podría incluirse en una lista de estatuas y monumentos cuya permanencia evaluará una comisión creada por el alcalde Bill de Blasio, provocando preocupación e indignación en la comunidad dominicana.
De Blasio anunciará en los próximos días los integrantes del grupo que evaluará qué estatuas deben ser eliminadas de propiedades públicas por considerarse que sugieren odio, división, racismo, antisemitismo o que son contrarias a los valores de la ciudad.
El alcalde tomó la decisión tras los incidentes raciales en Virginia, que impulsaron en varios puntos del país la eliminación de estatuas de líderes confederados, que apoyaban la permanencia de la esclavitud.
La presidenta del Concejo Melissa Mark Viverito pidió recientemente que se incluyera en la lista la estatua de Cristóbal Colón, del popular sector de Columbus Circle en Manhattan, enfrentando la oposición de italoamericanos que han dicho que lucharán por su permanencia.
Los miembros de la comisión dominicana dijeron que al defender la estatua de Duarte están haciendo lo mismo que los neoyorquinos de origen italiano que defienden la de Colón.
“El origen de la polémica (con Duarte) es en función de asociar el movimiento independentista con un movimiento segregacionista en relación a Haití, y nada más lejos de la verdad. La obra de Juan Pablo Duarte es una de amor, de entrega, de solidaridad”, dijo por su parte el vicecanciller.
Juan Pablo Duarte (1813-1876) lideró la lucha por la independencia de su país junto con Matías Ramón Mella y Francisco del Rosario Sánchez, los padres de la patria, bajo una sociedad secreta que llamó La Trinitaria.
Su estatua, ubicada al inicio de la Sexta Avenida, a pasos del popular barrio chino, fue un regalo del Gobierno dominicano en 1978.
El concejal Rodríguez destacó el crecimiento de la comunidad dominicana en esta ciudad, asegurando que son uno de cada ocho neoyorquinos. “No somos un grupo arrimado ni acabado de llegar”, señaló.
Agregó que en ningún documento de Duarte ni en sus poemas “hay una palabra peyorativa hacia los haitianos”, con los que comparten la Isla de la Española.
La comisión dominicana, que deberá rendir un informe a la Cancillería, se reunirá la próxima semana con representantes del Departamento de Parques, que tiene bajo su cuidado las estatuas y monumentos en lugares públicos.
