El presidente de Rusia, Vladimir Putin, sostendrá este lunes, 11 de enero, una serie de conversaciones en Moscú con el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián y el presidente Azerbaiyán, Ilham Aliyev, para discutir la evolución del alto el fuego en el enclave de Nagorno Karabaj, según ha anunciado este domingo el Kremlin.
“Por iniciativa de Vladimir Putin, el 11 de enero habrá negociaciones a tres bandas en Moscú entre el presidente de la Federación de Rusia, el presidente de la República de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, y el primer ministro de la República de Armenia, Nikol Pashinián”, según la nota recogida por la agencia oficial de noticias rusa Sputnik.
Según la nota, la reunión girará en torno a la aplicación de la declaración tripartita del 9 de noviembre de 2020 sobre Nagorno Karabaj y los pasos siguientes para resolver los problemas regionales, con un énfasis especial en la asistencia a la población afectada por las recientes hostilidades, así como el desbloqueo y el desarrollo de los vínculos comerciales, económicos y de transporte.
Además, Vladímir Putin planea mantener reuniones separadas con Aliyev y Pashinián.
Las hostilidades en Nagorno Karabaj, que volvieron a estallar a finales de septiembre pasado y provocaron miles de muertos durante un mes y medio de combates, cesaron el 10 de noviembre en virtud de una declaración adoptada por los líderes de Armenia, Azerbaiyán y Rusia.
Por el acuerdo entre las partes, Rusia envió fuerzas de paz a la zona del conflicto, en un principio durante cinco años. El contingente, de unos 2.000 efectivos, se desplegó a la vez que ocurría la retirada de fuerzas armenias desde los distritos azeríes de Agdam, Kelbecer (Kalbajar) y Lachín, ocupados durante la guerra de 1992-1994.
Conforme a la declaración tripartita, los bandos en conflicto han de permanecer en sus posiciones actuales, realizar un intercambio de prisioneros de guerra, otros detenidos y cuerpos de los caídos.
Los militares rusos ejercerán el control de la línea divisoria entre las fuerzas armenias y azeríes, así como del corredor de Lachín, que conecta a Nagorno Karabaj con Armenia. Por su parte, Ereván deberá garantizar el transporte entre la república autónoma de Najicheván, el enclave que se encuentra entre Armenia, Irán y Turquía, y las zonas del oeste de Azerbaiyán.