Aseguran sentirse “traicionados” por haber sido obligados a descansar en el párking tras dos semanas defendiendo el lugar
Miles de miembros de la Guardia Nacional de Estados Unidos han vuelto al Capitolio tras haber sido desalojados de forma inesperada y obligados a descansar en un párking después de dos semanas defendiendo el lugar.
“Nos sentimos increíblemente traicionados”, ha manifestado uno de los cerca de 5.000 guardias a los que la seguridad del Capitolio ordenó abandonar las instalaciones este jueves.
Los militares fueron enviados a un aparcamiento cercano al Capitolio que no tenía conexión a internet y solo disponía de un enchufe y un baño, informa el portal de noticias Politico.
“Ayer, decenas de senadores y congresistas caminaron a lo largo de nuestras filas, tomándose fotos, dándonos la mano y agradeciéndonos nuestro servicio. En 24 horas, nos han desterrado a la esquina de un párking”, ha lamentado un guardia.
Al enterarse de los hechos, el líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, ha publicado un mensaje en Twitter en el que ha calificado de la situación como “indignante” y ha asegurado que llegaría “al fondo” de la cuestión.
Por su parte, la senadora demócrata Tammy Duckworth, quien perdió ambas piernas en combate, ha utilizado la misma red social para relatar que había realizado “varias llamadas” y que la Policía del Capitolio se había “disculpado con los guardias”, a los que se les permitiría volver a las instalaciones.
La portavoz de la Policía del Capitolio, Eva Malecki, ha avanzado que recientemente habían pedido que se redujeran de doce a ocho horas los turnos de las tropas para que pudiesen tener más descansos fuera del complejo del Capitolio, si bien no ha explicado por qué se llevó a cabo el desalojo a los aparcamientos.
Asimismo, los guardias han asegurado que no han recibido ningún comunicado con las razones y han mostrado su preocupación por pasar sus descansos en espacios reducidos con acceso limitado a los servicios cuando al menos cien de ellos han dado positivo por coronavirus, según recoge Politico.
Tras el asalto al Capitolio el 6 de enero, más de 6.000 efectivos fueron movilizados para garantizar la seguridad del lugar antes de la toma de posesión del actual presidente, Joe Biden.