Más de 125 incendios forestales permanecen activos en Florida, que registra el peor año de fuegos de los últimos años, con más de 320 provocados, informó hoy el Servicio Forestal del estado.
Los más de 320 incendios provocados en lo que va de año han consumido ya más de 20.000 acres (8.100 hectáreas), frente a los cerca de 400 de este tipo que se registraron durante el año 2016.
La situación de sequía y escasez de lluvias que padece Florida llevó el pasado 11 de abril al gobernador, Rick Scott, a declarar el estado de emergencia.
La orden ejecutiva de Scott autorizó al director de la División de Manejo de Emergencias de Florida (DEM) a activar el plan de control integral de emergencias para mitigar la amenaza de los incendios, al tiempo que requiere la asistencia federal y moviliza a la Guardia Nacional en el estado.
“Las graves condiciones de sequía han aumentado el peligro de los incendios forestales en todo el estado, y, desafortunadamente, el hombre el causante de muchos de ellos”, señaló en un comunicado el comisionado de Agricultura de Florida, Adam Putnam, quien señaló que se trata de la temporada más activa de incendios desde el año 2011.
Putnam pidió la colaboración de los residentes de Florida para “parar a los pirómanos y proteger la vida, propiedad y fauna” en el estado.
Los cerca de 125 fuegos activos todavía han consumido hasta ahora unos 31.424 acres (12.726 ha) de terreno, 25 de los cuales son considerados grandes por la autoridades, con un alcance de más de 100 acres.
Uno de los condados más afectados recientemente por los incendios forestales es el de Pasco, donde las llamas han arrasado 2.275 acres (921 ha), mientras otros cuatro fuegos han consumido más de 157.000 acres (63.585 ha).
En Polk, en el centro de Florida, las llamas calcinaron recientemente 5.500 acres (2.227 ha) y destruyeron una docena de viviendas. El condado de Collier, en la costa suroeste, con más de 7.000 acres (2.835 ha) consumidos, y el de Hernando, en la costa oeste, con 1.100 acres calcinados (445 ha) son otras zonas afectadas por las llamas.