El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha dado este viernes la bienvenida al diálogo que Turquía y Grecia abrirán el lunes, primer paso para resolver sus diferencias en el Mediterráneo oriental, asegurando que la OTAN, a través del mecanismo diseñado para evitar roces militares, ha ayudado a acercar posiciones.
Coincidiendo con la visita del ministro de Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, el líder político de la OTAN ha destacado los contactos en el seno de la organización entre turcos y griegos lo que “ha ayudado a reducir las tensiones y crear espacio para las discusiones políticas”.
La Alianza Atlántica lanzó un mecanismo pactado por las partes a principios de octubre con el objetivo de desactivar tensiones en el Mediterráneo oriental. Esto fue posible gracias al diálogo bilateral en el seno de la organización militar.
Por su lado, el ministro turco ha reiterado la necesidad de fortalecer la “unidad y solidaridad” dentro de la Alianza Atlántica. “Turquía asume su papel de liderazgo en asegurar la defensa de la Alianza.
Ankara mantiene una disputa por la delimitación marítima en el Mediterráneo con Grecia y Chipre que se agravó durante el verano con el despliegue de buques en la zona por parte de Turquía, pero también de Francia e Italia en solidaridad con Atenas.
MISIONES EN IRAK Y AFGANISTÁN
Stoltenberg ha tratado con Cavusoglu el futuro de la misiones de la OTAN en Irak y Afganistán, poniendo de manifiesto la contribución turca a las operaciones de la Alianza.
Sobre la primera, han debatido la futura expansión para garantizar la lucha contra Estado Islámico, mientras que en el escenario afgano han señalado a la cumbre de ministros de Defensa prevista para febrero será clave para definir la misión de la OTAN.
En cuanto a la crisis en Libia, Stoltenberg ha expresado su preocupación por la situación y ha recordado la posición de la Alianza de comprometerse con la construcción de instituciones de defensa y seguridad en el país.
