La esposa del autor de la matanza de Orlando de 2016, en la que murieron 49 personas y decenas resultaron heridas en una discoteca gay, conocía sus planes desde hacía tiempo y así lo confesó en su interrogatorio con el FBI, informó hoy el diario local The Orlando Sentinel.
Un agente del FBI recogió en un documento de doce páginas, firmado por Noor Salman, sus declaraciones durante 18 horas de entrevista tras el ataque terrorista y tiroteo masivo que conmocionó al país y al mundo.
Salman dijo que cuando su marido, Omar Mateen, salió de casa ese 12 de junio ella ya sabía que se dirigía a Orlando para perpetrar una masacre en la discoteca Pulse y que había visto cómo preparaba el ataque desde muchos meses atrás.
Ese testimonio lo dio hoy a conocer The Orlando Sentinel después de que las autoridades federales lo divulgaran discretamente a finales de diciembre en una tanda de documentos sobre el caso.
“Mis miedos se habían convertido en realidad y él hizo lo que dijo que iba a hacer. Yo me negaba a creerlo, no podía creer que el padre de mi hijo fuera a herir a otras personas”, relató Salman al agente del Buró Federal de Investigaciones (FBI).
La defensa de Salman ha pedido que estas declaraciones no se incluyan en el juicio, previsto para marzo, con el argumento de que estaba en custodia cuando las hizo y no se le habían comunicado de manera adecuada sus derechos (la Advertencia Miranda).
Los abogados del Gobierno aseguran, sin embargo, que Salman no estaba en custodia, que era libre de irse en cualquier momento y que sus declaraciones fueron voluntarias.
Salman enfrenta cargos por ayudar a una organización terrorista y por obstruir a la justicia.
Omar Mateen, un guardia de seguridad que había jurado lealtad al Estado Islámico (EI), entró armado con un fusil de asalto y una pistola automática al club Pulse cuando se celebraba una fiesta latina y disparó indiscriminadamente.
Mató a 49 personas e hirió a al menos 68 antes de que las fuerzas del orden lo abatieran.
Los abogados de la viuda aseguran que ella no tenía conocimiento de los planes de Mateen ni de sus conexiones con grupos terroristas islámicos.
Las autoridades estadounidenses determinaron que la matanza fue un ataque terrorista.