La corte suprema de los Estados Unidos de Norte América acaba de eliminar 50 años de los derechos federales al aborto. De los nueve miembros fósiles que están a cargo de la corte suprema 5 votaron en contra al aborto y 4 votaron a favor del aborto como derecho constitucional. Gracias a esa decisión retrograda y discriminatoria en contra de la mujer, se espera que la mayoría de los estados hagan que el aborto sea ilegal. Al estar eliminada de forma federal, eso deja a cada estado decidir si es legal o no. Pero también hace que no se gaste un centavo federal en procedimientos de aborto. En Puerto Rico todavía es legal y hoy el tribunal supremo de la isla ha comunicado su decisión de dejar la ley como esta y no prohibir el aborto. Algunos legisladores locales todavía desean cambiar ese derecho de la mujer pero se han encontrado con un grupo muy active que se opone a que se cambie la ley. Sospechamos que los derechos de los LGBTQ son los próximos en quitarse lo cual sería otro paso de los conservadores que se comprometieron con el ex presidente Trump y el Partido republican de cambiar las cosas y quitar derechos de poder contraer matrimonio, adoptar un hijo y tener derechos legales entre parejas del mismo sexo. La discriminación esta muy parecida a la época de los puritanos cuando amarraban a un árbol y le pegaban fuego a las mujeres que eran acusadas de practicar la brujería. ¿Pero que puede traer esta decisión de prohibir el aborto? Lo primero es que crea una situación difícil para esas mujeres que han sido violadas y el gobierno federal les obliga a tenerlo para luego que el violador tenga el derecho de seguir torturando a la victima de violación al querer visitar a su hijo producto de la violación. Lo segundo es que crea un problema de salud a la mujer pobre que no tiene a donde ir y recurre a una clínica clandestina que sea un mosquero donde puede morir si el aborto se hace fuera de un hospital por un medico. Tercero, que las personas que desean hacerse un aborto vayan a Canadá donde es legal hacerse un aborto. En todo caso, el quitar el derecho al aborto no va a detener el problema. Lo que hace es crear mas problemas de salud y muerte entre las mujeres pobres que son hispanas, afro americanas, y de otras razas. Cuarto, que ponen al medico en un sistema de carpeteo prohibiéndole que hagan abortos y que cobren por esos servicios al plan de salud. Quinto, que el derecho a tener contraceptivos para evitar quedar embarazada se quite totalmente. Lo que si podemos concluir es que estos jueces que han decido darle reversa a una ley de 50 años están fuera de época, todos están decrépitos, no pueden tener hijos, simpatizan con la discriminación en contra de la mujer multirracial pobre y por eso hay que quitarle derechos. Es muy peligroso cuando el gobierno comienza a meterse en la decisión de los cuerpos de los ciudadanos. La verdadera libertad es cuando la persona puede hacer lo que decida con su cuerpo siempre y cuando no afecte los demás. Se supone que la nación americana sea una de libertades donde la gente es la que manda y decide como colectivo. La constitución garantiza tengamos separación de estado y religión. Tal parece que los jueces de la corte suprema federal desean hacer un cambio a la constitución para poner restricciones religiosas al trágala. En este siglo 21 debemos tener mas libertad para ser felices y para poder progresar sin la intervención directa del gobierno en los asuntos personales de cada individuo. Los valores son de cada cual y deben respetarse al igual que las leyes que proporcionan mas derechos a las mujeres. No debemos quitarlas por motivaciones raciales ni religiosas. Podemos ver los resultados de los gobiernos religiosos paternalistas del medio oriente donde la religión todavía no le da derechos a la mujer y son infelices. En Puerto Rico el aborto es legal según la ley estatal y seguirá siendo pero no se podrá usar dinero federal para esos efectos. Dígale a su legislador que no esta de acuerdo con esa decisión de la corte suprema federal y que Puerto Rico sea un sitio donde se le respeten los derechos a las mujeres y grupos LGBTQ como seres humanos que somos.