Israel y Turquía anunciaron este miércoles que reanudarán sus relaciones diplomáticas plenas, tras varios años de tensiones, pero Ankara advirtió que continuará “defendiendo los derechos de los palestinos” pese a este acercamiento.
El primer ministro israelí, Yair Lapid, dijo que la medida supone un “importante activo para la estabilidad regional” y “una noticia económica muy importante para los ciudadanos de Israel”.
Según la oficina de Lapid, ambos países designarán embajadores y cónsules generales y se reanudarán los vuelos directos.
El primer ministro israelí mantuvo una llamada telefónica con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, durante la cual coincidieron en que la normalización de relacionesconduciría “a muchos logros, especialmente en los sectores del comercio y el turismo”, agregó.
La oficina de Erdogan señaló que en la llamada el presidente turco expresó su apoyo al “desarrollo de la cooperación y el diálogo entre Turquía e Israel sobre una base sostenible y de respeto por las sensibilidades respectivas”.
Las relaciones entre Turquía e Israel se empezaron a debilitar en 2008, a raíz de una operación militar israelí en la Franja de Gaza.
Los vínculos se degradaron aún más en 2010, con la muerte de 10 civiles en un ataque israelí contra el barco turco “Mavi Marmara” que intentaba romper el bloqueo impuesto por Israel a ese territorio palestino.
En 2016, hubo un acuerdo de reconciliación, pero este quedó en agua de borrajas en 2018, cuando el ejército israelí mató a más de 200 gazatíes en protestas en la frontera entre Gaza y el territorio israelí. Turquía expulsó al embajador israelí y en respuesta, Israel hizo lo propio con el consul general turco en Jerusalén.
El anuncio del miércoles se produce tras meses de esfuerzos bilaterales para reforzar los lazos, con visitas recíprocas de responsables de alto rango.
En mayo, Mevlut Cavusoglu se convirtió en el primer ministro de Exteriores turco en visitar Israel en 15 años y el president israelí, Isaac Herzog, viajó a Ankara en marzo.
El regreso de los embajadores “es importante para mejorar las relaciones bilaterales”, afirmó Cavusoglu, agregando que, no obstante, Turquía seguirá “defendiendo los derechos de los palestinos, de Jerusalén y de Gaza”.
-‘Legitimar al ocupante’-
Turquía mantiene relaciones con el gobierno palestino de Cisjordania ocupada y con el movimiento islamista Hamás, que gobierna la Franja de Gaza.
“Como siempre hemos dicho, seguiremos defendiendo los derechos de los palestinos”, insistió Cavusoglu el miércoles.
Hamás, némesis de Israel, reaccionó con recelo al anuncio. “Esperamos de todos los países árabes, musulmanes y amigos que aíslen al ocupante y lo presionen para hacerle responder a los derechos legítimos de los palestinos”, dijo a AFP Basem Naim, mando del movimiento armado palestino en Gaza.
“Toda normalización con el ocupante (israelí) es una legitimación de su presencia en nuestras tierras”, agregó.
Pese a ello, no hay que “hacerse ilusiones” y pensar que las relaciones bilaterales serán tan buenas como en la década de 1990, consideró Efraim Inbar, presidente del Instituto de Estrategia y Seguridad de Jerusalén.
“Mientras Erdogan esté en el poder, seguirá habiendo un cierto nivel de hostilidad de Turquía hacia Israel”, declaró Inbar a AFP.
-Inversiones-
El presidente israelí señaló este miércoles que la restauración de relaciones diplomáticas completas “alentarán mayores relaciones económicas, el turismo mutuo y la amistad entre los pueblos israelí y turco”.
Turquía se enfrenta a una fuerte inflación y al hundimiento de su moneda. En ese contexto, Ankara “intenta normalizar sus relaciones con muchos países de la región”, incluidos Emiratos Árabes Unidos o Arabia Saudita, con el objetivo de “atraer inversiones extranjeras directas”, consideró Gallia Lindenstrauss, analista del Instituto de Estudios Estratégicos (INSS) en Tel Aviv.
Pese a las disputas diplomáticas de los últimos años, el comercio entre los dos países ha continuado y Turquía sigue siendo un destino popular para los turistas israelíes.