La campana de la Bolsa de Nueva York tintineará el 13 de septiembre para celebrar los 50 años del grupo Perry Ellis International, fundado por George Feldenkreis, un cubano de origen ucraniano que fue conocido como “el rey de la guayabera” y hoy comanda junto a su hijo marcas como Jantzen, Penguin o Cubavera.
Feldenkreis, fundador y presidente ejecutivo de Perry Ellis International (PEI), como se conoce desde 1999 el grupo creado a partir de Supreme International, se declara “orgulloso” de haber nacido en Cuba y de ser “hispano”, según dice a Efe en Miami.
Acompañado de su hijo Oscar Feldenkreis, desde 2016 director ejecutivo (CEO) y presidente de PEI, el fundador repasa estos primeros 50 años de andadura de un emporio empresarial que tiene su sede central en Miami, cotiza en el NASDAQ desde 1993 e hizo ventas por valor de 3.100 millones de dólares en el último año fiscal.
“Vamos a llegar a los 100 años con el favor de Dios”, señala Oscar Feldenkreis, quien cree que el crecimiento va a venir por el mercado internacional más que por el nacional y cada vez más por el comercio electrónico, que hoy representa un 12 % del negocio de PEI.
Europa, América Latina, especialmente México, y Canadá son las áreas donde ve más posibilidades de expansión para un grupo con 71 tiendas propias y más de 90 bajo licencia.
Aunque en Estados Unidos incluso grandes cadenas como Macy’s y JC Penney están cerrando tiendas, Feldenkreis hijo opina que “la gente siempre va a comprar ropa”, especialmente cuando hay productos novedosos que les hacen sentir “felices y más juveniles”.
“Si uno no cambia con las necesidades del consumidor, no tiene futuro”, agrega el CEO de PEI, grupo que el año fiscal 2017 ha tenido unos ingresos de 861 millones de dólares.
La familia Feldenkreis cuenta con el 25 % de las acciones de PEI, lo que la convierte en el accionista mayoritario.
George Feldenkreis afirma que los negocios familiares son una bendición si se da la combinación de que el cabeza de familia tiene la visión de crear algo que perdure y sus hijos tienen la inteligencia y la capacidad de llevarlo adelante.
A sus 82 años recién cumplidos sigue activo y disfrutando de actividades al margen de Perry Ellis, especialmente de ser miembro del Consejo de la Universidad de Miami (UM).
“El problema central es la educación”, subraya cuando se le pregunta por el futuro de los estadounidenses en general y de los hispanos en particular.
Aunque opina que solo por el número que han alcanzado ya tienen un futuro “brillante”, este veterano empresario, que fue un pionero en encargar la confección de ropa en países asiáticos, empezando por Japón, donde produjo en los años 60 guayaberas para el mercado puertorriqueño, advierte que los hispanos corren el riesgo de quedarse atrás si no cambian sus patrones educativos.
Por eso exhorta a los padres y madres hispanos a inclinar a sus hijos hacia los estudios de ciencias. Hay “una escasez enorme de ingenieros” y el futuro está en las “computadoras, en los robots”, señala con convicción.
“Si no ajustamos la educación a lo que va a ser el futuro”, “nos vamos a quedar siempre relegados”, afirma este hijo de ucranianos que se formó en el Centro Asturiano de La Habana y años después estudió derecho con una beca.
Radicado en Miami desde 1961, Feldenkreis empezó su carrera empresarial como proveedor de piezas de repuesto para motocicletas para una compañía de Nueva York.
Esas piezas las compraba en Japón, país al que empezó a viajar regularmente y donde también empezó a comprar uniformes escolares y guayaberas por encargo de su hermano, que se había establecido en Puerto Rico.
Ese fue el germen de Supreme International, que dio lugar en 1999 a PEI, uno de cuyos fuertes es hoy la ropa para jugar al golf.
Feldenkreis recuerda cómo fue cambiando de país asiático para fabricar las guayaberas que le dieron el título de “rey” en busca de obtener lo mejor a un precio más bajo. Así pasó de Japón a Corea del Sur, luego a China y ahora a Bangladesh.
El 85 % de la ropa que comercializa PEI hoy en día se hace en países asiáticos, aunque también produce en México y Honduras y en países árabes que venden a EE.UU. sin impuestos, como Jordania y Emiratos Árabes Unidos, subraya el fundador del grupo.
“Yo estoy muy orgulloso de mis raíces hispanas. En Miami todo el mundo me conoce como tal. Me invitan a muchos sitios buscando a un hispano que habla un ingles más o menos decente”, subraya con humor.