El presidente de EEUU firma una orden para “fortalecer la resiliencia de las cadenas de suministro”
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha revocado este miércoles una orden del expresidente Donald Trump por la que se impedía la entrada de migrantes que “presentan un riesgo para el mercado laboral del país” y limitaba así la cantidad de visas de trabajo para extranjeros temporales en el país en medio de la pandemia de coronavirus.
“La suspensión de entrada impuesta en la Proclamación 10014 (…) no promueve los intereses de Estados Unidos. Al contrario, perjudica a Estados Unidos, incluso evitando que familiares de ciudadanos estadounidenses y residentes legales se unan a sus familias aquí”, ha señalado el mandatario estadounidense en una proclamación sobre la revocación de esta medida y que difunde la Casa Blanca.
Biden ha lamentado también que la orden impuesta por Trump en abril de 2020, y prorrogada en dos ocasiones, “perjudica a las industrias del país que utilizan talentos de todo el mundo” y “a las personas que fueron seleccionadas para recibir la oportunidad de solicitar visas, y a las que habían recibido, a través de la Lotería de Visas de Diversidad del Año Fiscal 2020”.
Y es que, la medida ha impedido que personas que habían resultado beneficiadas con la lotería de visas y familiares de residentes legales y ciudadanos estadounidenses ingresaran al país, lo que ha provocado, en algunos casos, “la demora y posible pérdida de su oportunidad de recibir visas de diversidad en 2020 y cumplir sus sueños en Estados Unidos”.
Además de revocar la orden de Trump, Biden ha ordenado a los secretarios de Estado, de Trabajo y de Seguridad Nacional que revisen “cualquier reglamento, orden, política y cualquier otra acción similar desarrollada de conformidad con la Proclamación 10014 y, según corresponda, emitirán una guía revisada de acuerdo con la orden publicada este martes.
SUMINISTRO DE PRODUCTOS “CRÍTICOS”
Por otro lado, este miércoles Biden ha firmado una orden ejecutiva que ayudará a abordar las “vulnerabilidades” de las cadenas de suministro en “sectores críticos”, de modo que Estados Unidos “esté preparado para resistir cualquier crisis”.
En concreto, la orden recoge que se tiene que “fortalecer la resiliencia de las cadenas de suministro” frente a “pandemias y otras amenazas biológicas, los ciberataques, los choques climáticos y los fenómenos meteorológicos extremos, los ataques terroristas, la competencia geopolítica y económica y otras condiciones que pueden reducir la capacidad de fabricación crítica y la disponibilidad e integridad de bienes, productos y servicios críticos”.
Asimismo, indica que el asistente presidencial para Asuntos de Seguridad Nacional y el de Política Económica coordinarán las acciones del Poder Ejecutivo que sean necesarias para implementar la orden, para la que, además, se debe consultar a las partes interesadas externas, como las industrias, sindicatos o instituciones.
Para avanzar en esta medida, también se define una revisión de los riesgos de la cadena de suministro dentro de los 100 días posterior a la publicación de la orden para cuatro productos “vitales”, los semiconductores, los minerales y materiales clave — tierras raras–, productos farmacéuticos y baterías avanzadas –como las de los vehículos eléctricos–.
En segundo lugar, esta orden inicia una revisión a largo plazo de la base industrial de seis sectores de la economía durante el próximo año, como ha detallado Biden.
“El pueblo estadounidense nunca debe enfrentar escasez de bienes y servicios de los que depende, ya sea su automóvil o sus medicamentos recetados o la comida en el supermercado local”, ha subrayado el presidente sobre la orden.
En este sentido, ha recordado que se han escuchado “historias de horror de médicos y enfermeras que llevaban bolsas de basura sobre la bata porque no tenían más batas. Y estaban lavando y reutilizando sus máscaras una y otra vez en el quirófano”.
“Eso nunca debería haber sucedido nunca. Y nunca volverá a suceder en Estados Unidos. No deberíamos tener que depender de un país extranjero, especialmente uno que no comparte nuestros intereses o nuestros valores, para proteger a nuestra gente durante una emergencia nacional”, ha agregado.
Biden ha incidido en que las cadenas de suministro “resilientes, diversas y seguras” ayudarán a “revitalizar nuestra capacidad de fabricación nacional y crearán empleos bien remunerados” y ha asegurado que “estimularán nuevas oportunidades para las pequeñas empresas, las comunidades de color y las áreas económicamente desfavorecidas”.
Igualmente, ha garantizado que impulsará “nuevas inversiones en investigación e innovación y nuestra fuerza laboral, invirtiendo en formación y asociaciones universitarias que conducirán a nuevas tecnologías y nuevas soluciones”.