Un grupo de doce sediarios, los antiguos portadores de la Silla Gestatoria de los Papas, han trasladado a hombros a las 08.50 horas el féretro de Benedicto XVI hasta el altar predispuesto en la plaza de San Pedro, desde el que el Papa Francisco, acompañado por el cardenal decano, Giovanni Battista Re, celebrará su funeral este jueves 5 de enero. El secretario personal del papa emérito, Georg Ganswein y el maestro de ceremonias Litúrgicas Pontificias, Diego Giovanni Ravelli, han coloca el evangelio encima del féretro mientras los fieles rezaban el rosario.
Las puertas de la basílica de San Pedro, que este miércoles se cerraron a las 19:00 horas para la preparación del cuerpo para el sepelio y su introducción en el ataúd de ciprés, se han vuelto a abrir poco antes de las 09.00 horas de la mañana.
Los sediarios del Vaticano, que en el pasado se encargaban de transporta ral Romano Pontífice en Silla Gestatoria, utilizada por última vez por el Papa Juan Pablo I, serán también los encargados de llevar en procesión el féretro a través de la puerta de Santa Marta hacia las Grutas Vaticanas, en compañía de algunos cardenales, para su inhumación en la capilla donde estuvo enterrado el Papa Juan XXIII.
Está previsto que el Pontífice oficie las exequias del papa alemán siguiendo paso a paso lo que marca el rito ‘Ordo exequiarumRomani Pontificis’, el mismo que se usaría si fuera un pontífice reinante, como ya se hizo en el funeral de san Juan Pablo II en 2005, aunque con algunos cambios. “La base es la misma, pero hay algunos elementos que dan originalidad al rito” y “otros elementos que faltan referidos a los más específicos de un Papa reinante”, según explicó el director de la oficina de prensa del Vaticano, Matteo Bruni.
Por ejemplo, se han eliminado las súplicas finales de la Iglesia de Roma y de las Iglesias orientales de la liturgia fúnebre. Pero también se han cambiado todas las lecturas de la liturgia de la Palabra respecto a las del funeral papal, además de todas las oraciones.