La Junta de Control Fiscal (JCF), creada bajo la Ley PROMESA, fue impuesta a Puerto Rico por el Congreso de los Estados Unidos de Norte America con el propósito de reestructurar la deuda y lograr la estabilidad fiscal de la isla. Sin embargo, sus decisiones han afectado múltiples sectores, incluyendo la educación pública. El Departamento de Educación de Puerto Rico (DEPR), que representa el presupuesto más grande de la isla, sigue siendo una de las agencias más problemáticas en términos de administración y transparencia. A continuación, se presentan preguntas críticas dirigidas a la Junta de Control Fiscal que deberían ser respondidas en beneficio del pueblo puertorriqueño.
1. ¿Por qué no existe un organigrama detallado del Departamento de Educación (Oficina Central) que refleje todos los empleados por departamento?
La falta de un organigrama claro y accesible en una página web es un problema crítico en la transparencia administrativa. Un organigrama visible y detallado permitiría al público conocer cuántos empleados tiene el DEPR en su Oficina Central, sus funciones, y cómo se distribuyen los recursos humanos. En una agencia con un presupuesto millonario, es indispensable que haya claridad sobre la estructura administrativa. ¿Por qué la JCF no ha exigido la creación y publicación de un organigrama público?
2. ¿Por qué no se publican todos los puestos del Departamento de Educación (Oficina Central) con los salarios correspondientes?
En aras de la transparencia y el uso eficiente de los fondos públicos, es vital que los salarios de los empleados del DEPR, especialmente en la Oficina Central, sean accesibles al público. El pueblo y la prensa tiene el derecho de saber cómo se distribuyen los recursos económicos, particularmente en una agencia que enfrenta recortes de fondos en áreas vitales como el salario de maestros y mejoras a las escuelas. ¿Qué impide que esta información sea de dominio público y fácilmente accesible?
3. ¿Por qué los empleados administrativos son nombrados más rápido que los maestros?
Uno de los problemas que afecta el rendimiento del sistema educativo es la lentitud y la dificultad de procesos de papel en la contratación de maestros. Mientras tanto, parece que los empleados administrativos son nombrados con mayor rapidez, algo que debería generar preocupación en cuanto a las prioridades del DEPR. ¿Por qué el proceso de contratación es más ágil para el personal administrativo que para los maestros, quienes son la base del sistema educativo?
4. ¿Por qué los empleados administrativos obtienen permanencia más rápido en sus puestos que los maestros?
Además de ser contratados más rápidamente, parece que los empleados administrativos logran obtener permanencia en sus puestos con mayor facilidad que los maestros, quienes en muchos casos pasan años, o incluso décadas, en puestos transitorios. Este fenómeno genera descontento entre el personal docente y afecta la estabilidad de las escuelas. ¿Cuáles son los factores que están provocando esta disparidad, y qué hará la JCF para garantizar un proceso equitativo?
5. ¿Por qué hay miles de maestros en puestos transitorios que llevan décadas y no consiguen permanencia?
El estatus transitorio de miles de maestros no solo afecta la estabilidad laboral, sino también el rendimiento académico de los estudiantes, ya que la rotación de personal impide una continuidad en la enseñanza. Es preocupante que maestros con muchos años de servicio sigan siendo considerados transitorios. ¿Por qué no se han tomado medidas para asegurar que estos maestros obtengan la permanencia que les corresponde?
6. ¿Qué controles existen en la Oficina de Recursos Humanos del DEPR para evitar nombramientos políticos sin competencia?
La politización en el Departamento de Educación ha sido un problema endémico durante décadas. Nombramientos sin competencia justa, basados en influencias políticas, erosionan la confianza pública en el sistema. ¿Qué controles se han implementado para evitar que este tipo de nombramientos continúe, y qué rol tiene la JCF y el FBI en asegurarse de que estos procesos sean justos y transparentes?
7. ¿Por qué, a pesar de que el número de estudiantes en las escuelas públicas de Puerto Rico se ha reducido a la mitad, la administración central y las regionales se han duplicado en número?
Es alarmante que, mientras la población estudiantil ha disminuido drásticamente, el número de empleados administrativos en la Oficina Central y en las oficinas regionales ha aumentado. Este crecimiento desproporcionado en la administración central sugiere una asignación ineficiente de recursos, algo que debería estar bajo la lupa de la JCF y el FBI.
8. ¿Por qué no se automatizan todos los procesos administrativos y de papeleo?
La automatización de procesos en el sector público puede aumentar la eficiencia, reducir el costo y reducir el margen de error humano. Sin embargo, el DEPR sigue siendo una de las agencias más burocráticas, con una dependencia excesiva en procesos manuales y de papeleo. ¿Por qué no se ha avanzado hacia la automatización completa, lo que podría liberar fondos para invertir en la educación de los estudiantes?
9. ¿Cuántos millones de dólares se gastan en Internet para cada escuela y por qué aún no hay una conectividad robusta en todos los salones de clase?
En la era digital, una conectividad robusta debería ser la norma en todas las escuelas. Sin embargo, a pesar de las inversiones significativas en servicios de Internet, muchas escuelas siguen careciendo de una conectividad adecuada. ¿Cómo es posible que, con millones invertidos, no se vea una mejora tangible en este aspecto fundamental para el aprendizaje moderno? ¿Porque no permiten que el internet sea controlado localmente por cada escuela?
10. ¿Cuántas escuelas cerradas y edificios del DEPR siguen pagando servicios de utilidades e Internet?
El cierre de cientos de escuelas ha dejado al DEPR con una cantidad considerable de propiedades inactivas. No obstante, en muchos casos se siguen pagando facturas por servicios como Internet y electricidad. ¿Cuáles son los costos de mantener estas escuelas cerradas y qué planes tiene la JCF para evitar este despilfarro de recursos?
11. ¿Por qué no se asignan tres (3) maestros por salón en la escuela elemental K-6 si los estudiantes están fracasando en lectura y escritura?
Si el rendimiento académico de los estudiantes en lectura y escritura sigue siendo alarmantemente bajo, ¿por qué no se implementa una estrategia que refuerce el apoyo en el aula? Asignar tres maestros por salón en los grados K-6 podría ser una solución efectiva para abordar el fracaso en estas áreas críticas. Asignar administradores nuevos al problema no ha resuelto nada.
12. ¿Por qué se siguen ofreciendo talleres para maestros que cuestan millones pero no aportan mejoras a la educación de los niños?
El gasto excesivo en talleres de capacitación para maestros que no producen resultados tangibles en el aprendizaje de los estudiantes es un problema recurrente. No existe un estudio que pruebe la eficiencia de los talleres de maestros en la educación de los niños. ¿Por qué se sigue invirtiendo en talleres ineficaces en lugar de dirigir esos fondos a iniciativas que realmente impacten el éxito académico de los estudiantes?
Conclusión
Estas preguntas reflejan las preocupaciones urgentes sobre la administración del sistema educativo en Puerto Rico. La JCF, como organismo encargado de supervisar el uso de los fondos públicos, tiene la responsabilidad de exigir respuestas claras y promover una mayor transparencia. Las respuestas a estas preguntas deberían estar accesibles en una página web pública para que el pueblo puertorriqueño pueda conocer en detalle cómo se manejan los recursos de su sistema educativo.
