El gobernador de Florida, Rick Scott, acudió hoy a una misa en memoria de las víctimas mortales de la matanza perpetrada esta pasada madrugada en una discoteca gay de la ciudad de Orlando (centro de Florida).
“Mi corazón está con las víctimas y los familiares”, dijo en español el gobernador desde el altar de la iglesia El Calvario ante medio millar de fieles, en su mayoría de origen hispano, tal y como se prevé que puedan ser buena parte de las víctimas mortales de la masacre en el club gay, que celebraba la Noche Latina.
Entre los 50 fallecidos se cuenta Omar Seddique Mateen, presunto autor de la matanza, que murió por disparos de la policía.
Acompañado por el vicegobernador, Carlos López Cantera, Scott destacó que en una ciudad, estado y país de “inclusión” la fe de los cristianos les ayudará a superar este “terrible” momento.
Tras asistir a la ceremonia religiosa, el gobernador destacó que en este “periodo de duelo” van a ayudar a las familias de las víctimas mortales y los más de 50 heridos, algunos de ellos en estado crítico.
Scott se felicitó de que hubiese un agente del orden en el local en el momento del suceso pues en caso contrario la cifra podía haber sido mucho mayor.
“Vamos a seguir protegiendo a nuestros habitantes y visitantes”, dijo el gobernador de Florida, que vive en gran medida del sector turístico.
Scott declaró que las autoridades van a “aprender” de este suceso para “hacerlo mejor” en el futuro.
Por su parte, López Cantera lamentó que muchas familias van a “recibir hoy noticias horribles”, y consideró que la unidad de la comunidad, sin importar su etnia o raza, puede ayudarlas.
“Es tan doloroso este día y es tan horrible que no es necesario definirlo, todos tenemos dolor, ya sean latinos, afroamericanos, o blancos, todos tenemos dolor. Es un día triste para Orlando, Florida y el país y debemos responder de manera apropiada”, dijo.
El pastor Saturnino González afirmó durante su oración que tras este suceso habrá “paz de nuevo” en la ciudad, a la que volverá la “seguridad, la hermandad y el amor.
Las siete primeras identidades de las víctimas mortales reveladas apuntan a que entre los asistentes a la Noche Latina de este sábado predominaban los hispanos.
El ataque, perpetrado en la región central de Florida, donde hay una gran población latina, especialmente puertorriqueña, ocurrió en una discoteca frecuentada por el colectivo de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales (LGBT) en una noche de “Reggaeton, Bachata, Merengue, Salsa”, según rezaba el cartel de la discoteca.
